Por Salvador Batista
Fotos: Salvador Batista
Bruselas es la gran ciudad de Flandes, capital de Bélgica, y también capital de la Comunidad Europea.
El turista que visite esta ciudad se encontrará con una agradable y deslumbrante metrópoli cosmopolita, la cual agrupa el modernismo de las grandes capitales, pero también el ambiente agradable provinciano debido a que Bruselas conserva una buena parte de antiguos barrios populares y una gran vida cultural.
La parte antigua de la ciudad se puede visitar a pie o en bicicleta y también puedes comprobar que las principales calles comerciales también se sitúan en esta parte de la ciudad denominada La Grote Markt o Plaza Mayor, considera una de las plazas más bellas del mundo.
“Stoofstraat”, se encuentra cerca de la Plaza Mayor o “Grote Marka”, donde hace unos siglos el famoso Manneken Pis (el niño regordete que hace pipi), apagó un fuego cuando orinaba. A este barrio, se le conoce como Ciudad Baja y se extiende hasta el Jardín Botánico.
Al visitar el Ayuntamiento y la Casa del Rey, los cuales son los edificios más destacados, aunque el primero fuera el único que quedó intacto tras el bombardeo francés de 1695. Pero la reconstrucción de la plaza se hizo de tal modo que hoy en día conserva una armonía que aún fascina. Los salones del Ayuntamiento acogen innumerables recuerdos de esta metrópolis.
Cuando te encuentras en la Casa del Rey te puedes encontrar con el Museo de la Ciudad de Bruselas, cuyos objetos más preciados son algunos cuadros de Breughel y el rico guardarropa de Manneken Pis.
La Catedral de San Miguel y Santa Gudula domina el Barrio Real desde lo alto de una pequeña colina, se trata de una de las pocas iglesias góticas con las dos torres terminadas.
Si continuas caminando te encontraras con el Treurenberg en el cual se llega al barrio del Gobierno, una zona particularmente elegante y bien conservada, construida en el siglo XVIII alrededor del Parque de Bruselas.
El Palacio Real es un edificio que se sitúa en el antiguo emplazamiento de la antigua Corte de los Duques de Brabante, incendiada en 1731. Iniciado en 1820 bajo el reino del rey Guillermo, fue modificado en 1904 bajo Leopoldo II, que lo hizo reconstruir en estilo Luis XVI.
El Antiguo Palacio de Carlos V, es un importante emplazamiento arqueológico de Bruselas. Los vestigios de la Capilla de Carlos V, así como los de la calle Isabelle, han dejado de ser los únicos visibles.
Bajo la Plaza Real, se ha descubierto una gran sala de ceremonias. Esta amplia sala aislada, sumamente alta y más antigua que la capilla, es del siglo XVI. El Aula Magna de los Duques de Borgoña se convertirá con el paso del tiempo en la de Carlos V. Más abajo, se ha redescubierto un nuevo tramo de la calle Isabelle.
Este complejo arqueológico se extiende incluso más allá de la esta antigua calle, sobre la cuesta de Condenberg. El Hotel de Lalaing-Hoogstraeten y su extraordinaria galería de estilo gótico tardío, está unido al emplazamiento de la Capilla de Carlos V y de la calle Isabelle.
Atomium
Esto fue construido con motivo de la Exposición Universal de 1958, fueron necesarios 15.000 trabajadores durante tres años para finalizar el monumento. Se encuentra a las afueras de la ciudad, en el barrio de Heizel, dentro del Bruparck, y junto al estadio de fútbol y al parque Mini-Europe, que alberga representaciones en miniatura, en proporción de 25/1, de los símbolos más característicos del continente.
Entrar al Atomium merece la pena, ya que subir, en ascensor, hasta el átomo más elevado puedes disfrutar de unas magníficas vistas de la ciudad. La comodidad es total ya que el descenso se efectúa mediante escaleras mecánicas y, a menudo, algunos de los átomos se convierten en salas de exposición.
Cerveza y Chocolate
Bélgica es el mejor destino cervecero por excelencia ya que ofrece más de 400 variedad de cerveza de diferentes gustos y sobre todo sabores.
De acuerdo a los expertos para degustar una buena cerveza belga es imprescindible hacerlo en su copa para que cada tipo de cerveza pueda potenciar su sabor, aroma y color.
Los chocolates de Bélgica son reconocidos internacionalmente por su calidad, muchos son elaborados, según las tradiciones chocolateras del siglo atrás.Debido a su gran tradición la ciudad cuenta con el famoso Museo del Cacao y el Chocolate el cual atrae una gran cantidad de visitantes cada año. Además Bélgica cuenta con más de 200 variedades de este exquisito dulce.
