A
partir del 30 de octubre la ruta Madrid-Santo Domingo será con el nuevo B787
Dreamliner.
Esta aeronave ofrece eficiencia en el consumo de combustible y su
flexibilidad en cuanto a autonomía no tienen precedentes, lo que permite abrir
nuevas rutas de forma rentable y optimizar el rendimiento de la flota y la red.
Y para los pasajeros
constituye una experiencia de vuelo única, con más confort y menos cansancio.
Materiales
avanzados
El 787 Dreamliner avión
comercial que se fabrica en un 50% con materiales compuestos, más resistentes y
ligeros que el aluminio.
Estos extraordinarios
materiales constituyen una de las tecnologías fundamentales responsables del
rendimiento incomparable del 787 en lo que a consumo de combustible se refiere.
Los materiales compuestos
(plásticos reforzados con fibra de carbono) conforman las principales secciones
del 787: el fuselaje, la cola y las alas.
Rendimiento
medioambiental excepcional
·
El 787 consume un 20% menos de combustible y genera
menos emisiones de carbono que los demás aviones de tamaño similar.
·
Más
silencioso para las poblaciones
El impacto acústico del 787 es un 60%
inferior al de otros aviones de su tamaño, lo que significa menos ruido para
las poblaciones cercanas a los aeropuertos.
Mejor
vista
Las ventanillas son un 30% más
grandes que en el Boeing 767 y permiten al pasajero controlar el nivel de
luminosidad con sólo apretar un botón.
Un
viaje más confortable
Los materiales compuestos
permiten un menor nivel de altitud en la
cabina, haciendo el viaje más confortable para los
pasajeros, de acuerdo con los últimos estudios. La cabina del 787 está
presurizada a un nivel de 1.828,8 metros (609.6 metros por debajo de la mayoría
de los aviones).
Las pruebas muestran que,
debido a que el cuerpo absorbe un 8% más de oxígeno en la sangre a esta
altitud, los pasajeros sufren menos dolores de cabeza, mareos y cansancio.
Un
vuelo más cómodo
El 787 Dreamliner se ha
diseñado para garantizar un vuelo más suave en caso de turbulencia moderada. La tecnología de vuelo más suave permitirá
reducir por ocho los casos de pasajeros que experimentan cinetosis al detectar
la turbulencia y enviar a la superficie de control del ala la orden de
contrarrestarla, suavizando el viaje.
Humedad
más elevada
Desarrollos recientes en control climático permiten una mayor
humedad en el aire de la cabina, reduciendo los efectos de sequedad asociados a
volar.
Aire
más limpio
Un sistema de filtración de aire más
avanzado no sólo filtra bacterias y virus, sino también olores y otros agentes contaminantes
que pueden producir irritación de garganta, ojos y nariz.
Más
espacio para su equipaje de mano