Por Salvador Batista
Fotos Salvador Batista
Para muchos alejarse de la ciudad capital, en esta Semana Santa, sería la mejor opción. Salir y disfrutar de aire fresco del campo o recibir los rayos del sol en una playa, es lo que todos desearían en estas vacaciones.
Pero los que no tienen planes de vacacionar tiene la opción de pasar la Semana Santa en Santo Domingo, disfrutando de dos cosas buenas, primero, de la tranquilidad que se respirará en esta ciudad, por el traslado de sus residentes al interior del país y segundo por las múltiples cosas que tiene para ver y disfrutar.
Un buen sitio para comenzar a disfrutar la Semana Mayor , como se le dice popularmente, es el parque Colón, este parque se llama así por la estatua de Cristóbal Colón que se encuentra aquí esculpida en el siglo XIX por un escultor francés llamado Gilbert.
En este parque hay un par de cafeterías, barres y restaurantes muy agradables para tomar un refresco, café o sino disfrutar de un buen atardecer.
A su lado se encuentra una de las calles donde más turistas transitan, por quedar en el mismo centro de la zona colonial, esta es la calle de El Conde, la cual es peatonal y comercial, y posee una gran cantidad de tiendas especialmente de souvenirs, arte, discos y algunos restaurantes.
Muy cerca del parque Colón y al sur de este se encuentra la catedral de Santa María la Menor, construida entre 1514 y 1544 dicen que fue la primera catedral de América.
Calle Las Damas
Tiene este nombre debido a las elegantes damas de la nobleza española que paseaban en los atardeceres luciendo sus mejores vestidos y galas. Además es una de las calles más antiguas y encantadoras ya que en ella se puede ver los más bellos edificios coloniales de la ciudad colonial.
Si se camina un par de cuadras más encontraremos la fortaleza Ozama o fortaleza Santo Domingo, construida para proteger a la ciudad de los ataques enemigos.
Desde aquí se pueden ver unas vistas impresionantes del rio Ozama y del puerto marítimo.
La Plaza de España
Al final de la calle Las Damas nos encontraremos con la Plaza de España y el Alcázar de Colón. Este monumento muy espectacular se caracteriza por que en el mismo vivió Diego Colón, hijo de Cristóbal Colón, y también fue morada temporal de otros muchos como Pizarro, Cortés, Balboa y Ponce de León camino de sus futuras conquistas a América.
Un poco de Pueblo
Un lugar que no debes dejar de visitar, si está abierto, es el mercado Modelo de Santo Domingo.
Este bullicioso mercado es el más grande de artesanía que hay en la capital orientado hacía el turista aunque también muchos dominicanos se acercan a comprar algunos artículos.
Está compuesto por decenas de tiendas, todas bajo una gran cubierta, donde se venden todo tipo de artesanías típicas del país, pinturas naif, tabacos, licores y muchos otros artículos como en un gran rastrillo.
En este mercado podrás encontrar una gran variedad de las típicas y populares "muñecas sin rostro" dominicanas: figuras de muñecas pintadas en barro o porcelana sin rostro.
Un poco de Cultura
No muy lejos de allí se encuentra el parque de la Independencia. Este pulmón verde de la capital es un lugar muy concurrido de personas que van a pasear, descansar y relajarse.
En la Avenida Independencia esquina Máximo Gómez se encuentra el palacio de Bellas Artes, un impresionante palacio desde el punto de vista arquitectónico que celebra exposiciones de arte y actos culturales temporales.
Jardines y demás quehaceres
Vamos primero al Jardín Botánico Nacional el cual se encuentra alejado del centro en la zona noroeste de la ciudad rodeada por urbanizaciones de clase media alta de las colonias de Arroyo Hondo.
El Jardín tiene una superficie de 180 hectáreas y destaca su plaza central, su reloj floral, un jardín japonés, el herbolario y las plantas endémicas.
En la parte occidental de la ciudad se encuentra el Parque Mirador Sur. Este bonito parque está cercano a la avenida Anacaona donde se sitúan la mayoría de las embajadas extranjeras.
El parque es muy visitado por paseantes, ciclistas, corredores y patinadores. En el parque se pueden encontrar numerosas cuevas de piedra caliza antiguamente habitadas por los indios taínos.
Justo al lado contrario, al este de la ciudad y muy cerca del Faro a Colón, nos encontramos con las cuevas de Los Tres Ojos.
Situadas al borde de la Autopista de las Américas (dirección aeropuerto) estas cuevas tienen profundas lagunas subterráneas. Entre estalagmitas y estalactitas una barca recorre las lagunas en las cuevas.
Muy cerca de las cuevas se encuentra el Acuario Nacional. Merece la pena dedicarle un tiempo, especialmente si viaja con niños.
En el acuario se pueden observar diferentes especies. Hay un túnel de cristal donde se pueden contemplar tiburones procedentes de las aguas cercanas del mar Caribe.
Pero la gran estrella de este acuario es "Tamaury", un manatí antillano huérfano, que fue rescatado en la costa cerca de Barahona.
